7° Grado 2017
San Martín
La vuelta del
receso escolar siempre cuesta y mucho más aún si la profe nos pide que
reflexionemos sobre algunas cuestiones de la producción escrita que nos tomó
antes de las vacaciones.
Así comenzó
todo, entre reglas ortográficas, uso de conectores, tiempos verbales en la
narración y sintaxis. Los sagrados quince días invernales nos anestesian
siempre las neuronas, sin embargo veníamos bastante bien hasta que la seño (muy
confiada en el éxito de las respuestas) preguntó…
-¿Qué estructura sintáctica podía haber usado el compañero
Andrés para mejorar esta oración de su cuento?
Silencio… Al ver que la “aposición” estaba bajo los efectos
de nuestra anestesia, la cara le cambió drásticamente y pidió ejemplos para
analizar en el pizarrón. El grupo de alumnos cercano a la puerta del aula vio a
la bibliotecaria preparando la cartelera de agosto y se inspiró:
-San Martín, el padre de la Patria,
-José de San Martín, Héroe de los Andes,
-El vencedor de Chacabuco, el general correntino,
-San Martín, el libertador de América,
-El Santo de la Espada, San Martín,
-Don
José, el padre de Merceditas,
Mientras la
profe las escribía, una irónica voz proveniente del grupo del fondo: -¿no será
demasiado para una sola persona? Ella, con una sonrisa desafiante, abrió un
camino inesperado… ¡y se vino LA investigación! Grupos con computadoras, otros
en biblioteca y algunos con material videográfico.
A medida que
fue pasando el tiempo, esos irónicos cuestionamientos fueron aclarados y
encontramos el por qué de tantas aposiciones. Jamás participó en guerras
civiles y luchó siempre por la soberanía de los pueblos latinoamericanos, vivió
obsesionado por expulsar al realista de estas tierras sin ensuciar su sable con
sangre criolla. A pesar de sus dificultades de salud, planificó
estratégicamente el Cruce de los Andes para lograr la libertad de Chile. Fue
decisivo para este objetivo el triunfo en la Batalla de Chacabuco de la que
recientemente se ha cumplido su bicentenario. Todo el pueblo chileno le
reconoció sus virtudes como ser humano y como militar, por eso le ofrecieron el
cargo de gobernador el cual se negó a aceptar no por desprecio sino por
considerar que era merecedor del mismo el general O’Higgins ya que era hijo de
esas tierras. A días de las elecciones nos detuvimos a pensar si alguno de
nuestros políticos actuales cedería su puesto de poder a otro que considerara
más apto. Sin ser pesimistas, nos permitimos dudarlo… Este gesto lo repite
tiempos después (una vez liberado Perú), al pasarle la posta a Bolívar en la
causa de la independencia latinoamericana.
Nos parece
importante mencionar que habiendo consultado distintas fuentes y autores, la
versión de San Martín es única y coincidente. Su lucha por la libertad no se
limitó al campo de batalla y el sable sino también a una batalla ideológica
teniendo siempre presente que “la mano que empuña una pluma es más fuerte que
la que empuña un sable”.
Finalmente,
pudimos concluir que si bien José de San Martin fue un héroe, nunca dejó de ser
un hombre con enormes sentimientos y como un buen padre, (tanto de la Patria
como de Mercedes) decidió retirarse a vivir a Francia con su hija. Allí logró
la paz que su pueblo no le ofrecía y pudo descansar hasta su muerte.
Increíblemente, lo que comenzó como un error de prácticas del lenguaje,
terminó siendo un gran aprendizaje sobre la figura de este HOMBRE. Eso sí,
difícilmente este grupo de séptimo grado olvide qué es una aposición.
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